La infertilidad es la incapacidad de una pareja de quedar embarazada o de que una mujer complete un embarazo con éxito. Según las estimaciones, la infertilidad se prueba después de dos años de relaciones sexuales sin protección. A diferencia de la esterilidad, la infertilidad femenina no es definitiva.
Ya hablamos anteriormente de las causas de la infertilidad masculina. En este caso, nos centramos en los trastornos de concepción en la mujer. Puede deberse a diferentes trastornos o disfunciones ginecológicas: endometriosis, disfunción ovárica, pólipos uterinos, obstrucción de las trompas de Falopio, obesidad, estrés, consumo excesivo de alcohol, pero lo veremos a continuación de forma más detallada.
Síntomas de la infertilidad femenina
La ausencia de embarazo es el principal síntoma de la infertilidad femenina. Pero, ojo, concebir un hijo de forma natural puede llevar algo de tiempo. Así que no te preocupes si no obtienes un resultado positivo en lo que al embarazo se refiere.
El proceso de fertilización es complejo y puede llevar mucho tiempo. Sin embargo, es aconsejable consultar a un ginecólogo si la ausencia de embarazo está asociada con trastornos del ciclo menstrual (amenorrea, dismenorrea …), flujo vaginal anormal o incluso dolor pélvico.
Causas de la infertilidad femenina
La infertilidad femenina se clasifica esquemáticamente en 5 grupos principales:
Trastornos de la función ovárica
Los trastornos de la función ovárica representan aproximadamente la mitad de las infertilidades femeninas. Cuando no están relacionados con la edad de la paciente, a menudo se deben a una interrupción de la función endocrina (exceso o defecto de uno de los reguladores). En concreto, se traducen en una gran dificultad o en una incapacidad para producir un ovocito que puede ser fertilizado. Encontramos entre las patologías causantes de trastornos ováricos las siguientes:
- Síndrome del ovario poliquístico (SOP).
- Ovarios multifoliculares.
- Ovarios macropolicicos.
- Anovulación debido a una fuerte fuente de estrés, gran ganancia o pérdida de peso, secreción excesiva de prolactina, etc.
- Menopausia precoz.
- Insuficiencia ovárica.
Anomalías tubales
En casi el 25% de las mujeres con dificultades para concebir, la infertilidad se debe a un deterioro de las trompas de Falopio. Es esencial para la fertilización (es en el tronco que se realiza la reunión entre el ovocito y los espermatozoides), sin embargo, el tronco puede dañarse. Incluso a veces está completamente obstruido por una infección o una inflamación. Las diversas dolencias asociadas a la infertilidad tubárica son:
- Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP).
- Algunas infecciones y enfermedades de transmisión sexual: salpingitis, clamidia, etc.
- Endometriosis.
- Agenesia bilateral de las trompas de Falopio.
- Apendicitis.
- Exposición transgeneracional en el útero al destilbeno (DES).
- Tras un embarazo ectópico.
- Historial de cirugía pélvica.
Factores uterinos
A veces, la dificultad de la procreación se debe a una malformación uterina o un problema relacionado con el revestimiento uterino (endometrio) que es demasiado fino, incluso hostil. Congénitos o adquiridos, estos factores uterinos pueden, en particular, prevenir la buena implantación del feto en la cavidad uterina y favorecer los abortos espontáneos repetidos. Entre ellos, encontramos con frecuencia:
- El útero bicorne.
- El útero unicorne.
- Pólipos endometriales.
- Sinequias uterinas.
- Fibromas (cuando son numerosos y grandes).
- Endometriosis.
Factores cervicales
La infertilidad femenina puede ser causada por cambios cervicales como lesiones cervicales o estenosis. En el caso de la patología cervical, el cuello uterino ya no garantiza su función amortiguadora, lo que hace que la fertilización sea incierta. Las causas cervicales más comunes de infertilidad:
- Pólipos.
- Endometriosis.
- Ciertas secuencias de intervención quirúrgica o legrado (conización, síndrome de Asherman), exposición al DES, etc.
Factores genéticos
Más raramente, algunos síndromes genéticos, como el síndrome de Turner, están acompañados por infertilidad, al igual que ciertos rasgos genéticos (por ejemplo, el síndrome de X frágil que conduce a la menopausia temprana).
¿Cómo se establece un diagnóstico de infertilidad femenina?
En caso de dificultad para lograr un embarazo, es esencial consultar a un ginecólogo, el único profesional autorizado para realizar una investigación médica adecuada.
Para esto, el profesional de la salud tiene una batería de pruebas para confirmar y detectar la causa exacta de la infertilidad: análisis de sangre, frotis vaginal, ecografía pélvica, equilibrio hormonal … Para los casos más difíciles, también puede realice la prueba de Hühner, una prueba post-coito que permite, entre otras cosas, analizar la calidad del moco cervical.
¿Cuál es el tratamiento de la infertilidad femenina?
El tratamiento de la infertilidad femenina dependerá de su origen. Si se trata de trastornos menstruales, se pueden recomendar tratamientos hormonales (estimuladores de la ovulación, por ejemplo). Además, se optará por el abordaje quirúrgico en presencia de quistes ováricos u obstrucción de las trompas de Falopio, mientras que se propondrá el uso de técnicas de reproducción asistidas médicamente a algunas parejas.